Formulación y evaluación de nutraceúticos basados en la combinación de múltiples familias de compuestos bioactivos vegetales
El trabajo reciente con flavonoides del equipo de trabajo ha puesto de manifiesto los mecanismos moleculares por los que desarrollan su potencial promotor de la salud in vivo. No es tan sólo una capacidad antioxidante y capturadora de radicales libres la que entra en juego para mejorar aspectos en los organismos que los consumen, que también las tienen, sino que además son capaces de modular la expresión de genes. Entramos por tanto en el ámbito de la Nutrigenómica en que podemos analizar qué genes se activan específicamente tras la ingesta de ciertos compuestos bioactivos que pueden estar incluidos en la dieta.
En el caso de los flavonoides, existen moléculas concretas que han demostrado un potencial promotor de la salud y de elongación del tiempo de vida a través de mecanismos moleculares concretos. Esa activación a nivel molecular, y partiendo de compuestos o extractos que son comerciales, consideramos que es compatible con los efectos demostrados en otras familias de compuestos, más específicamente en las familias de los polifenoles, de los estilbenos y de las betalaínas, que ejercen sus funciones bioactivas y moduladoras de la salud por otras vías.
La prueba de concepto aquí descrita planeta utilizar la información científica generada por el grupo de investigación y el know-how acumulado a través de años de experiencia en la obtención, evaluación y estabilización de compuestos bioactivos vegetales para obtener productos nutraceúticos basados en flavonoides tras su combinación con otras familias de compuestos bioactivos vegetales.
Contamos con el equipamiento necesario para desarrollar distintas formulaciones a partir de las familias de compuestos vegetales de los que conocemos su mecanismo de acción, disponemos de las herramientas de evaluación de actividades biológicas, tanto in vitro como in vivo a través del uso del anima modelo Caenorhabditis elegans, y contamos con sistemas de análisis de la composición final en el producto terminado, así como con técnicas de estabilización.
El potencial de mercado es alto ya que actualmente existe una necesidad en las empresas del sector de la alimentación para justificar la posible participación de la ingesta de determinados alimentos en una mejora de la calidad de vida, en un contexto de generación por parte de la industria alimentaria de productos que promuevan la salud. En este contexto en los últimos años se ha llevado a cabo el desarrollo de alimentos funcionales en los que la presencia de determinados compuestos puede aportar un efecto beneficioso sobre el consumidor. Se da la circunstancia de que esas moléculas con propiedades promotoras de la salud se encuentran naturalmente en plantas o alimentos a los que a veces se les denomina en ambientes comerciales ¿superalimentos¿. Sin embargo, el mundo de los alimentos funcionales presenta un grave problema.
Desde la puesta en marcha de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) la mayoría de los ingredientes alimentarios presentados por las empresas del sector para enriquecer alimentos funcionales han sido rechazados por el comité de expertos del máximo organismo europeo en materia de alimentación. Las razones son dos. Por una parte, la EFSA ha emitido innumerables informes acerca de la ausencia de estudios in vivo del efecto de muchos compuestos bioactivos que confirmen los resultados encontrados in vitro. Por otra parte, también critican la falta de caracterización física, química y biológica de dichos compuestos bioactivos.
Nuestra propuesta evitará estos dos problemas en el desarrollo de un compuesto nutraceútico basado en compuestos bioactivos de plantas. Así pues, los potenciales usuarios o clientes son las empresas del sector de la alimentación y de las bebidas, en su esfuerzo por obtener nuevos productos que puedan cumplir con alegaciones saludables.