Generación de subproductos de la membrana amniótica útiles en la cicatrización de heridas complejas.
En grandes heridas traumáticas y úlceras cutáneas, a menudo se produce una desregulación no completamente comprendida del proceso inflamatorio, lo que conduce a la cronificación de la lesión. Este fenómeno implica una merma significativa en la calidad de vida y la independencia de las personas afectadas, además de un notable esfuerzo sanitario para lograr una recuperación que no siempre es exitosa.
Grupo de Regeneración, Oncología Molecular y TGFß del IMIB
El grupo de Regeneración, Oncología Molecular y TGFß del IMIB centra su principal línea de trabajo en comprender este fenómeno para desarrollar soluciones basadas tanto en el uso de terapia celular (TC) como en la aplicación de compuestos bioactivos (CB). Hemos demostrado que la TC basada en el uso de membrana amniótica (MA) puede modular la señalización del TGFß, involucrada en el estancamiento de la lesión, reactivando así la epitelización. El estudio detallado de los efectos de la MA en queratinocitos primarios humanos y en células HaCaT, una línea estable de queratinocitos, ha permitido determinar que esta modulación desencadena la expresión de genes relacionados con la proliferación y migración celular. Esto se manifiesta en cambios en la cito-arquitectura de la célula epitelial, aumentando su capacidad de interacción con la matriz extracelular y mejorando el rendimiento migratorio en ensayos artificiales de heridas, en consonancia con las propiedades observadas en su aplicación clínica en uso compasivo.
Estrategias basadas en CB
Simultáneamente, en cuanto a las estrategias basadas en CB, destacan los trabajos desarrollados en colaboración con miembros del Equipo de Biotecnología del IMIDA sobre las capacidades de los péptidos fibroína y sericina, derivados de la seda de Bombyx mori, para promover la migración celular tras la exposición directa in vitro.
Limitaciones técnicas
A pesar de estos avances, el desarrollo de estrategias traslacionales basadas en TC y CB enfrenta graves limitaciones técnicas debido a la naturaleza y el origen de estos agentes. Aunque la MA es clínicamente efectiva, debe obtenerse en condiciones controladas y someterse a controles de bioseguridad; su conservación requiere técnicas criogénicas, dificultando su almacenamiento y traslado; además, debe ser procesada en un recinto adecuado, como una sala blanca. En el caso de los péptidos utilizados como CB, la elevada actividad proteolítica en el lecho de la herida crónica reduce la eficacia de su uso in vivo. Por todo ello, para extender el uso de estas formidables herramientas terapéuticas, es necesario desarrollar soluciones técnicas que superen estas limitaciones.