La investigación en curso pretende responder a la cuestión sobre lo que llamamos ¿pensamiento político calvinista? e interrogarse sobre la existencia de las diferentes realidades que se pretenden designar y agrupar bajo el nombre de calvinismo.

Aunque Calvino fue considerado un dictador, el fundador de una teocracia y un pastor-redentor cuyas opiniones no fueron nunca contestadas en Ginebra y en las comunidades francesas reformadas (Jean SCHORER, Jean Calvin et sa dictature ; Eugène CHOISY, La théocratie à Genève au temps de Calvin), en lo que ha de ver con su pensamiento político son numerosos los estudios que han hablado de una transformación fundamental de su doctrina por sus correligionarios y sucesores (Robert Kingdon, Geneva and the consolidation of the French Protestant Movement), ligada a su propia indeterminación con respecto a temas clave como el derecho de resistencia. En este sentido, no está privado de fundamento Bodino (Les six livres de la République) cuando cita a Calvino en apoyo de sus tesis contrarias a la resistencia que los que se autodenominan calvinistas hacen a los presuntos tiranos.

Nuestro proyecto de investigación pretende considerar nuevos elementos que pueden ser útiles para renovar la discusión en torno a la relación entre Calvino y los bien o mal llamados calvinistas, relación que historiadores del pensamiento político moderno como Quentin Skinner (The Foundations of Modern Political Thought) han desarrollado limitándose casi exclusivamente a contrastar los textos elaborados por los autores inscritos en la tradición calvinista y hugonota.

Con el fin de ir más allá del análisis comparado de los escritos políticos, deberíamos acceder a otros documentos susceptibles de proporcionarnos clarificaciones respecto a la actitud de Calvino, Beza, Hotman o Gentillet, pensadores cuyos textos han sido estudiados ya en profundidad, con respecto a los conflictos que conmovieron al mundo reformado francés entre 1540 y 1600.

En este sentido, la lectura completa de los Registros del Consejo de Ginebra en la época de Calvino y de Beza es importante para reevaluar, en primer lugar, la imagen de un Calvino omnipotente que podríamos extraer si nos limitáramos a leer solamente los Registros de la Compañía de los Pastores de Ginebra en tiempos de Calvino. Habiéndose encontrado Calvino con la oposición, corrección y el comentario de los magistrados en multitud de ocasiones, es importante determinar en que medida fueron sus posiciones políticas adoptadas o rechazadas por los Consejos. Se podrá comenzar entonces a analizar su figura para evaluar si fue realmente el creador de una escuela de pensamiento en Ginebra. En segundo lugar, los documentos elaborados por los Consejos, testigo de las relaciones entre Ginebra, Francia, Berna, Zürich, etc. pueden también proporcionarnos informaciones valiosas sobre las posiciones políticas particulares de Beza o de los pensadores o juristas hugonotes que se refugiaron en Ginebra, conocidos muchos de ellos por su papel activo en las guerras de religión.

En último lugar, gracias a la consulta de las miles de cartas que Beza y Calvino dirigieron a señores, magistrados, príncipes e iglesias del mundo reformado francés podríamos contribuir a introducir nuevos elementos y matices, útiles para reevaluar la naturaleza de la relación que liga el pensamiento y la actitud política de Calvino y sus sucesores.